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| Imagen de la web oficial de Sarah. |
Lady Felipa Marbury es... rara
La hija brillante y con gafas de un marqués, se preocupa más por los libros que por los bailes, por la ciencia que por la temporada y los laboratorios más que del amor. Ella está deseando casarse con un hombre sencillo y vivir sus días tranquilamente con sus perros y sus experimentos científicos. Pero antes de eso, Pippa tiene dos semanas para experimentar todo lo demás, catorce días para la investigación de las partes emocionantes de la vida. No es mucho tiempo, y para hacerlo bien se necesita una guía familiar en los más oscuros rincones de Londres.
Ella necesita. . . un canalla
Ella necesita a Cross, el socio inteligente y controlado del infierno más exclusivo de Londres, con una reputación cuidadosamente elaborada para la maldad. Pero en la reputación a menudo se esconden los secretos más oscuros, y cuando lo no convencional y audaz Pippa amenaza todo lo que él trabaja para proteger se siente tentado a dar Pippa precisamente lo que quiere. . . pero él es más sinvergüenza de lo que parece, y necesitará toda su fuerza de voluntad para resistirse a dar a la dama más de lo que nunca imaginó.
Ella vive para la pasión
Audaz, impulsiva y un imán para los problemas, Juliana Fiori no era otra simplona señorita inglesa más. Se niega a vivir según las reglas de la sociedad: dice lo que piensa, no le preocupa conseguir la aprobación de nadie y puede lanzar un puñetazo con notable puntería. Su escandalosa naturaleza la convierte en el objeto preferido de todos los chismorreos londinenses… y justo en el tipo de mujer que el duque de Disdain quiere mantener bien lejos de su persona.
Para él la reputación lo es todo
Lo ultimo que Simon Pearson quiere en su ordenada vida es un escándalo. El duque de Disdain está demasiado centrado en mantener su título libre de toda mácula y sus secretos, a salvo. Pero cuando descubre a Juliana escondida en su carruaje una noche a altas horas de la madrugada, poniendo en peligro todo lo que él aprecia, jura enseñar a la insensata beldad una lección de decoro. Pero ella tiene otros planes: quiere dos semanas para demostrar que incluso un duque imperturbable no está exento de la pasión.
